Algo fundamental para evitar enfermedades es mantener un sistema de defensas en excelente estado, de esta forma mantenemos fuera del cuerpo a microorganismos como las bacterias, hongos y virus.
Si bien la alimentación es determinante para lograr un sistema inmunológico fortalecido, hay otras situaciones que lo afectan como el estrés y la ansiedad. Ambos pueden afectar la capacidad de nuestro sistema inmunológico y favorecer la aparición o contagio de diversas enfermedades.
¿Cómo saber si nuestras defensas están debilitadas?
Estos son algunos síntomas de que nuestro sistema inmune no se encuentra del todo bien:
✅ Infecciones y/o resfríos recurrentes
✅ Alergias
✅ Enfermedades simples, que duran más de lo normal, demoran en curarse o se agravan
✅ Fiebre frecuente
✅ Ojos secos
✅Cansancio habitual
✅ Náuseas y vómitos
✅ Diarreas
✅ Manchas en la piel
✅ Caída del cabello
Alimentos que fortalecen el sistema inmune.
Son muchos los alimentos naturales que pueden ayudar a fortalecer la línea de defensa del organismo. Algunas recomendaciones son:Incluir en la dieta hierbas naturales y especias como ajo, cebolla, orégano y cúrcuma.
🔸 Consumir alimentos ricos en vitamina A y betacarotenos: camote, zapallo, zanahoria, papaya, etc.
🔸 Alimentos con vitamina C: cítricos (naranja, mandarina, frutillas, arándanos), pimientos, brócoli, kiwi.
🔸 El zinc es clave para nuestro sistema de defensas. Lo podemos encontrar en semillas de calabaza (las puedes incluir en tu avena o ensaladas), frutos secos y menestras.
🔸 Pasar al menos 30 min al sol cada día con ropa clara o descubierta, para producir vitamina D.
🔸 Consume alimentos ricos en fibra, un componente muy importante que interviene en la función del sistema inmunitario promoviendo el crecimiento de tu flora bacteriana.
🔸 Puedes elegir alimentos con probióticos, es decir, bacterias con diversos efectos benéficos sobre el sistema inmune. Los encuentras en algunos yogures.
🔸 Evita el alcohol, el azúcar y la comida procesada como empacados, comida rápida, frituras, etc.
Algunos consejos extra.
🔹Lavarse las manos de forma adecuada y frecuente.
🔹 Hacer actividad física moderada.
🔹 Procurar tener un sueño reparador.
🔹 Manejar el estrés para evitar bajar las defensas.
🔹 Evitar los lugares muy concurridos.
🔹 No consumir azúcar, comida procesada y/o rápida, ni grasas trans.
🔹 Consumir diariamente frutas y verduras
Esperamos que estos consejos te sean de ayuda, y no olvides mantener la calma en medio de circunstancias estresantes, debido a que el estrés es un factor determinante que afecta la capacidad de nuestro sistema inmunológico.